La gobernadora provincial se mostró molesta hoy con los sindicatos docentes, a los que acusó de hacer «política partidaria» en medio de las discusiones paritarias, y ratificó que continuará «con el cambio» que propone el presidente de la Nación, Mauricio Macri.
«Siento que desde hace varias semanas los dirigentes gremiales dejaron de discutir salarios y empezaron a hacer política partidaria y gremial porque llevamos diez reuniones formales con seis propuestas en las que cada una era mejor que la anterior incorporando lo que ellos pedían», remarcó la gobernadora a la vez que agregó: «Ayer la propuesta fue que si aceptaban, el 65 por ciento por ciento de los docentes ganaría más de 17 mil pesos y la mitad ganaría más de 23 mil, con lo cual cada vez siento que va perdiendo fuerza el argumento salarial».
La Gobernadora está preparada para redoblar la apuesta en el conflicto con los docentes: no sólo decidió no firmar por decreto un aumento salarial para evitar cuestionamientos, sino que seguirá la puja en la Justicia para avanzar con la quita de la personería jurídica de los gremios que fueron al paro y con la aplicación del descuento a los docentes que adhirieron a la medida de fuerza en medio de la conciliación obligatoria que rige hasta el lunes.
Pero la pelea mayor que ahora quiere dar la gobernadora excederá el debate salarial actual. Vidal quiere discutir con los gremios de los maestros el esquema de ausentismo que considera «extremadamente abusivo», discutir una nueva forma de acuerdo de paritarias y fijar mecanismos a tomar en adelante ante los desastrosos resultados que arrojaron la pruebas Aprender entre los alumnos de todo el país.
La gobernadora bonaerense está convencida de que el conflicto docente se extenderá. Cree que hay una «intencionada posición política de los gremios» contra su gestión que se reflejó con el rechazo de seis propuestas salariales que ofreció la Provincia. Hoy por la tarde, los docentes rechazaron un piso del 19% en tres cuotas, una cláusula gatillo y una suma compensatoria por presentismo que había ofrecido Vidal. Así, decidieron ir al paro a pesar de que aún rige hasta el lunes la conciliación obligatoria.
«El paro será ilegal», dijo Vidal a sus ministros, a quienes instruyó a seguir avanzando en la justicia con la quita de la personería gremial de los gremios en huelga y con la multa por adhesión al paro para los maestros. Esta será la estrategia legal que seguirá la gobernadora ante la tesitura de los docentes de no aceptar la propuesta salarial ofrecida. Ni siquiera dará lugar a un decreto para dar un aumento para no ser cuestionada legalmente.
Por otra parte, la gobernadora bonaerense planteará una propuesta para pagar un «premio por presentismo» que equivaldría a pagar un plus de 400 pesos mensuales, lo que implicaría un ingreso de unos 5.000 pesos para los salarios promedios de los maestros que es de $19.000. También se planteó la Gobernadora discutir un nuevo sistema de encarar en la Provincia las paritarias. Esto sería que la discusión salarial con los gremios comience en noviembre y no en febrero o marzo, para evitar así que se pierdan días de clase por los paros.
«A esta altura del conflicto habrá que dar la discusión que nadie quiso dar. Ya no pasará por un tema de un aumento coyuntural sino que los docentes deberán someterse al debate de fondo», expresó a Infobae un funcionario cercano a Vidal.
La dirigente analizó que «cada vez más familias se van a la educación privada» producto de los «110 paros de los últimos diez años, porque tienen cuatro maestras distintas en un año, porque entre otras cosas los resultados del Operativo Aprender son mucho peores en las públicas que en las privadas».
Esta estrategia que se fijó la Gobernadora busca ponerse a los padres de los chicos que perdieron clases y a los docentes que no adhirieron al paro de su lado. Es el «efecto desgaste» al paro que busca Vidal. No obstante, la gobernadora admitió a sus allegados que el mes de huelga docente que ya lleva la provincia implicará un costo político a futuro que deberá pagar.