El atacante que armado con un cuchillo mató a un viandante el sábado por la noche en el centro de París «es un francés nacido en Chechenia en 1997, y sus padres luego de ser interrogado quedaron detenidos este domingo.
El joven «no tenía antecedentes judiciales», informó durante la noche el ministro del Interior francés, Gerard Collomb. Un peatón, de 29 años, murió y otras cuatro personas fueron heridas por este hombre que gritó «Allahu Akbar» (Alá es el más grande) y atacó a transeúntes con un cuchillo, antes de ser abatido por la policía. El grupo yihadista Estado Islámico (EI) reivindicó el atentado.
«Francia paga de nuevo el precio de la sangre, pero no cede ni lo más mínimo ante el terrorismo y los enemigos de la libertad», dijo el presidente Emmanuel Macron.
La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, que se trasladó inmediatamente al lugar donde se produjo la agresión, afirmó: «Esta noche, nuestra ciudad ha sido herida».
Es «un ataque cobarde y bárbaro que no puede reivindicarse de ninguna religión y que condenamos firmemente», afirmó por su parte la Gran Mezquita de París.
Este atentado se produjo en un momento en el que Francia está bajo amenaza terrorista. El último ataque mortífero, ocurrido el 23 de marzo en Carcasona, en el sur del país, llevó a 245 el número de víctimas mortales en atentados perpetrados en suelo francés desde 2015. No es el primer ataque con cuchillo en Francia. Un ataque similar tuvo lugar en Marsella, en el sureste, en octubre de 2017.
Poco antes de las 21H00 (19H00 GMT) -la policía recibió una llamada a las 20H47, precisó el primer ministro francés, Edouard Philippe-, indicando que un hombre joven atacó con un cuchillo a varias personas cerca de la plaza de la Ópera, en el II distrito de la capital, un barrio de bares, restaurantes y teatros muy frecuentado los sábados por la noche.
Según los testigos, el joven gritó «Allahu Akbar» (Alá es el más grande) en el momento del ataque. Cuando los policías llegaron al lugar, fueron amenazados por el agresor.
«Durante la intervención policial, cuando tres funcionarios fueron hacia él para intentar inmovilizarlo, él fue hacia ellos blandiendo su cuchillo», describió una fuente cercana a la investigación. Uno de los agentes utilizó su pistola de descargas eléctricas antes de que otro de sus colegas disparara dos veces e hiriera mortalmente al atacante.
Según fuentes próximas al caso, un hombre de unos 30 años que pasaba por allí resultó mortalmente herido. Otras dos personas fueron heridas de gravedad: un hombre de 34 años, que fue trasladado «urgentemente» a un hospital del oeste de la ciudad y una mujer de 54 años. Una mujer de 26 años y un hombre de 31 resultaron heridos de levedad.
«En los cinco minutos» que siguieron a la llamada de la policía, los agentes llegaron al lugar y «menos de nueve minutos» después el autor del ataque había sido abatido, contó Philippe. «Esta rapidez de reacción evitó un balance más alto», consideró el jefe de gobierno.
El atacante no llevaba consigo documentos de identidad y los investigadores han ya descubierto que era un joven que había nacido en Chechenia en 1997. Su cabello era castaño, con barba no recortada, vestido con un pantalón de chándal negro. Era un «soldado del Estado Islámico» y su «operación se llevó a cabo en respuesta a los llamados a tomar como objetivo a los estados de la coalición» internacional antiyihadista en Irak y en Siria, declaró una «fuente de seguridad» a Amaq, el órgano de propaganda del grupo EI.
Antes incluso de que se publicara esta reivindicación, la fiscalía de París había retenido la pista antiterrorista en el caso. «En base a testimonios según los cuales el agresor habría gritado ‘Allahu Akbar’ al atacar a peatones con un cuchillo, y al modo operatorio, confiamos la investigación a la sección antiterrorista de la fiscalía de París», anunció el fiscal de París, François Molins, ante la prensa hacia medianoche.
La fiscalía abrió la investigación por «asesinato» e «intento de asesinato» en «relación con una empresa terrorista», añadió el fiscal.