La Sala IV de la Cámara de Casación Penal confirmó este martes la prisión preventiva de Martín Báez, uno de los hijos del empresario Lázaro Báez, en el marco de la causa en la que se los investiga por presunto lavado de dinero en la denominada “Ruta del dinero K».
Tras esta decisión, el hombre de 39 años continuará detenido en la cárcel de Ezeiza, donde se encuentra desde el 7 de febrero.
Los jueces rechazaron por «inadmisible» el recurso presentado por la defensa de Báez, aprehendido hace doce días luego de que los magistrados detectaran el movimiento de más de 5 millones de dólares de una cuenta, pese a estar inhibido, según consignó el diario Clarín.
En su momento, los jueces que le dictaron la prisión preventiva entendieron que Báez tiene «capacidad de abrir cuentas y/o sociedades en el extranjero y así́ poder transferir y/u operar con fondos que podrían resultar el provecho del delito que se investiga y del que se desconoce su destino».
Martín, hijo mayor del empresario Lázaro Baez, quedó detenido por orden del Tribunal Oral Federal 4, tras el pedido del fiscal Abel Córdoba, quien solicitó la medida al entender que había movido más de 5 millones de dólares cuando ya estaba embargado por la justicia.
Córdoba recibió a fines de diciembre un informe de la Unidad de Información Financiera (UIF) que daba cuenta de los movimientos que hizo Martín Báez cuando ya pesaba sobre él una inhibición para poder hacerlo.
El Tribunal había dado la orden a la defensa de Baez para que su cliente presentara antes de terminar la audiencia a la que debía haber acudido, o de lo contrario pedirían su inmediata detención.
Ante esto, el hombre se presentó en el juzgado federal de Río Gallegos y explicó que no había viajado por un problema de salud de su hijo y que ya tenía pasajes para volar a Buenos Aires esa misma madrugada.
La justicia entonces determinó que extendían el plazo de presentación hasta el día siguiente donde finalmente se reunió junto a su defensor con los jueces Guillermo Costabel, Gabriela López Iñiguez y Adriana Pallioti, quienes dos horas después resolvieron que se dispusiera su prisión preventiva.
«Entendemos a esta altura que aquellas medidas cautelares oportunamente adoptadas no han sido suficientes, ello por cuanto a la fecha se han verificado nuevos hechos que denotan actos de entorpecimiento», sostuvieron los magistrados.
Por otro lado, los jueces consideran que “no puede soslayarse la posibilidad” de que, en caso de que Báez continúe en libertad, “peligre el recupero de los bienes que fueron el producto de los ilícitos que se encuentran involucrados en el juicio oral y público que venimos desarrollando”.
Por eso, considerando que “ha realizado actos de entorpecimiento de la investigación, en virtud de que habría procurado eludir las medidas de cautela patrimonial con el objeto de procurarse el provecho del delito que aquí se investiga, atentando de esta manera contra el descubrimiento de la verdad y el recupero de activos por los que nuestro país se encuentra comprometido por distintas convenciones y tratados internacionales”, correspondía dictar la prisión preventiva de Báez.