Tal como se preveía, el presidente Alberto Fernández evitó hacer anuncios concretos sobre la política de retenciones a las exportaciones del agro al hablar ante la Asamblea Legislativa en el Congreso, mientras se espera que se tomen medidas para modificar esas alícuotas, particularmente con una suba a las ventas de soja al exterior.
“El campo debe ser un protagonista importante. Los hemos convocado para que colaboren en nuestro programa de Argentina contra el Hambre. Deben hacer el esfuerzo aquellos que producen y exportan porque tienen mejores condiciones en la Argentina de hoy”, dijo al diferenciar entre grandes productores y otros pequeños. Y añadió: “Hemos hecho una propuesta generosa en materia de derechos a las exportaciones, que además preserva la situación de los pequeños productores”.
El mensaje del Presidente a los exportadores deja abierto el camino para la suba de las retenciones a la soja. Tal como se había anticipado, el Gobierno finalmente decidió avanzar en una suba en las retenciones alas exportaciones de soja del 30% al 33% para mejorar las posiciones de otros productos. Quedaron excluídos de la suba tanto el maíz como el trigo.
Si bien tras la reunión en el Ministerio de Agricultura de la semana pasada se admitió que se pasó a un cuarto intermedio con el sector ruralista, según señalaron fuentes oficiales «la decisión de subir las retenciones a la soja ya esta tomada».
La intención oficial, es que el adicional recaudatorio -estimados en más u$s 500 millones – sirva para mejorar posiciones de productos regionales, como es el caso de la pesca, actividad que beneficia a varias provincias, según señalaron fuentes oficiales a este medio.
“La intención de esta suba a la soja no es recaudatorio sino para poder mejorar la situación de actividades del interior del país”, comentaba una alta fuente oficial.
Es más, señalan que la decisión de elevar la alícuota “no está previsto que salga mañana” y que la reunión con la Mesa de Enlace y el ministro de Agricultura es justamente el analizar también otras necesidades del sector.
Justamente uno de los puntos de reclamo de las entidades es contar con líneas de crédito para adquisición de maquinaria agrícola, entre otros insumos. Asimismo, parece que una demanda colectiva de todos los sectores es contar con conectividad (Internet) al igual que la infraestructura vial. Estos temas y otros que pongan sobre la mesa de discusión serán analizados por las autoridades oficiales.
Decisión tomada
Lo que sí ya está decidido es elevar las retenciones de la soja aunque no hubo precisiones si la modificación de la alícuota afectaría también a los subproductos de la soja, como porotos, pellets y biocombustible.
Cabe señalar que por la Ley de Emergencia el Poder Ejecutivo está facultado para elevar las retenciones hasta 33% y no se espera que este viernes salga la resolución. También, en principio, no creen que el presidente Alberto Fernández haga referencia a este tema en su discurso del 1ero de marzo ante la Asamblea Legislativa.
De todas maneras esto no significa que la resolución se lleve a largas. De hecho la suspensión del Registro de Declaraciones Juradas de Ventas al Exterior (DJVE), no puede mantenerse por mucho tiempo. La suspensión abarcó las exportaciones de granos y derivados.
Cabe recordar, que el Poder Ejecutivo decretó una actualización de las retenciones al derogar el tope de la retención de 4 pesos por dólar exportado, lo que significó que la alícuota alcance los mismos niveles que los dispuesto en el gobierno de Mauricio Macri cuando repuso las retenciones para la exportación de productos agropecuarios. De esta manera, la soja pasó a tributar 30% contra el 24,7% anterior, mientras que el maíz y el trigo pasaron desde 6,7% hasta 12%, entre otros productos.
En fuentes de la Casa Rosada se especula con que será el propio presidente Alberto Fernández quien decidirá cuándo se anuncia el ajuste de las retenciones tras la reunión con la Mesa de Enlace y el ministro de Agricultura.
El sector sojero desde sus diferentes entidades hizo saber su malestar y anticipan que esto afectará a la producción futura. Pero, en el Gobierno argumentan que necesitan ayudar a las provincias para que la economía vuelva a funcionar.
La obra pública, un gran dinamizador, por el momento está paralizada, por esta razón, se toma esta decisión para contar con fondos y compensar de esta manera las bajas que se darán en las retenciones de otros productos. Y, saben que cuentan con el apoyo de la mayoría de los gobernadores.