El Gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, y el Gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, coincidieron en que «no tiene ningún sentido una paritaria nacional entre el Estado nacional y los gremios nacionales docentes» ya que el Estado Nacional no tiene docentes a cargo y por ello no debería ser quien fije el salario de los docentes provinciales.
Durante el transcurso del conflicto docente, uno de los principales reclamos de los gremios fue que se llame a una paritaria nacional, en lugar negociaciones directas con cada provincia.
Para pedir una paritaria provincial, los docentes se ampararon en el artículo 10 de la ley de financiamiento educativo y del decreto 457/07, que indica que el Estado y las organizaciones gremiales con representación nacional tienen que fijar anualmente el salario mínimo de la actividad.
Frente a ese reclamo, el Gobierno fue claro y desechó la posibilidad de que la negociación salarial se dé a nivel nacional. «Cada provincia tiene sus características puntuales que maneja cada provincia en paritarias, porque somos un país federal. El gobierno nacional no paga salarios», especificó el ministro de Educación de la Nación, Esteban Bullrich.
En ese marco, dos gobernadores peronistas respaldaron la postura del oficialismo de no convocar a una paritaria nacional docente. El mandatario de Salta, Juan Manuel Urtubey, y el de Córdoba, Juan Schiaretti, aseguraron que la discusión salarial se tiene que dar provincia por provincia.
«Más del 85 por ciento del componente salarial de un docente lo paga la provincia, ahora eso nos lleva a que cada provincia debe resolver el conflicto», explicó Urtubey. Y agregó su experiencia en la provincia que conduce. «Nosotros en Salta no tuvimos conflicto, dialogamos y resolvimos las cosas, espero que eso suceda en la provincia de Buenos Aires», indicó.
Por su parte, Schiaretti aseguró que «no tiene ningún sentido una paritaria nacional entre el Estado nacional y los gremios nacionales docentes». «Fíjese el contrasentido: se decía que la paritaria nacional existía para garantizar que las provincias más chicas tuvieran un piso mínimo de salario docente. Ahora resulta que, al día de hoy, hay catorce provincias que acordaron su convenio colectivo, que son precisamente las provincias chicas, y las que todavía estamos en negociaciones somos las más grandes», señaló el mandatario.