La Cámara Federal confirmó la validez de la pericia interdisciplinaria de la Gendarmería que determinó que el fallecido fiscal Alberto Nisman fue asesinado, al rechazar un planteo de nulidad del acusado Diego Lagomarsino.
En ese sentido, según el informe de la fuerza de la Gendarmería que solicitó el fiscal Eduardo Taiano, existió un plan para hacer parecer que Nisman se había suicidado.
La Sala II del tribunal, que integran los camaristas Eduardo Farah y Martín Irurzun, ratificó que la pericia es válida como una prueba más en la causa que investiga la muerte de Nisman en enero de 2015.
La defensa de Lagomarsino sostuvo que «las conclusiones a las que arribó el informe interdisciplinario encomendado a Gendarmería Nacional resultan carentes de fundamentación y han sido elaboradas con la finalidad de buscar la confirmación de una hipótesis predefinida».
Asimismo, los abogados defensores del perito informático sostienen que la pericia es inválida porque hubo «direccionamiento» y además «ruptura de la cadena de custodia» de las pruebas y «autocontradicción» de los peritos.
Cabe consignar que Lagomarsino ya fue indagado como supuesto partícipe primario y cuya situación procesal debe definir el juez federal Julián Ercolini.
El supuesto colaborador de Nisman se fue de las torres de Le Parc al atardecer del sábado 17 de enero de 2015 tras reunirse con el fiscal y según su versión, el fallecido fiscal le pidió que le llevara un arma porque tenía miedo por sus hijas, quienes estaban de viaje.