15 de marzo, 2018

Cierra Mossack-Fonseca, el estudio epicentro de los Panamá Papers

A través de un comunicado, la firma de abogados panameña dio haber sido "víctima de un ataque cibernético de escala mundial".

La firma de abogados panameña Mossack Fonseca, que quedó en el centro del escándalo financiero conocido como Panamá Papers, anunció el cierre de sus operaciones.

 

 

A través de un comunicado, la empresa dijo que fue «víctima de un ataque cibernético de escala mundial».

 

 

«El Consorcio Internacional de Periodistas Investigativos (ICIJ, por sus siglas en inglés) presentó al mundo, en base a información robada, un panorama desacertado de los servicios que prestábamos tergiversando la naturaleza de la industria y su papel en los mercados financieros globales», señaló.

 

 

En el plano local, los denominados Panamá Papers involucraron al presidente Mauricio Macri con causas por presunto lavado de dinero. Sin embargo, la Justicia dictaminó que el presidente no fue «socio ni accionista» de las sociedades off shore Fleg Trading y Kamegusha y que tampoco percibió «dividendos ni utilidades ni ganancias» de esas empresas ni fue titular de cuentas bancarias de las mismas.

 

 

Esa decisión se sumó a la adoptada en agosto por la Cámara Federal porteña, que dio por cerrada la investigación a Macri por supuesto lavado de activos en la causa Panamá Papers, por falta de apelación del fiscal ante esa instancia, y confirmó el pase del caso al fuero penal económico para que se determine si hubo una eventual evasión tributaria.

 

 

Según la empresa, las publicaciones del ICIJ estaban «plagadas de especulaciones y datos fuera de contexto» y «lograron cumplir una agenda mediática orquestada por algunos organismos internacionales».

 

 

Una fuente no identificada filtró unos 2,6 terabytes de información sobre las operaciones de Mossack Fonseca al periódico alemán «Süddeutsche Zeitung». La publicación de esta información sobre operaciones offshore, conocida como «Panamá Papers», desató un escándalo que afectó a políticos y empresarios alrededor de mundo.

 

 

De acuerdo con Mossack Fonseca, debido a esas publicaciones los directivos de la compañía redujeron las oficinas, así como el personal. De los 600 trabajadores que tenía en 2016, ahora quedan únicamente unos 50 empleados activos.

 

 

«El deterioro reputacional, la campaña mediática, el cerco financiero y las actuaciones irregulares de algunas autoridades panameñas han ocasionado un daño irreparable, cuya consecuencia obligada es el cese total de operaciones al público a finales del presente mes después de 40 años de crecimiento y de aportar social, cultural y económicamente a nuestro país», sostuvo el comunicado.

 

 

La empresa había sido fundada por los abogados Jürgen Mossack, de nacionalidad alemana, y Ramón Fonseca, jurista panameño, quien había sido el jefe político del gobernante partido Panameñista y estrecho colaborador del presidente Juan Carlos Varela.