El Ministerio de Educación, que conduce Alejandro Finocchiaro, realiza la primera reunión del año con los sindicatos docentes nacionales, luego de que el Gobierno emitiera un decreto que, entre otras cuestiones, eliminó la paritaria nacional, lo que generó malestar en los gremios.
Del encuentro, que se realiza en el Palacio Sarmiento, ubicado en pasaje Pizzurno 935, no participa el gremio mayoritario CTERA, cuya titular Sonia Alesso presentó una impugnación a la reunión.
Están presentes Sergio Romero, secretario general de UDA; Fabián Felman, secretario general de CEA; y Sara García, de AMET.
Acompañando al ministro, participan del encuentro Javier Mezzamico, Jefe de Gabinete del Ministerio de Educación; Manuel Vidal, Secretario de Gestión Educativa; Orlando Maccio, Secretario General del Consejo Federal de Educación; y Miguel Garófalo, Director Nacional de Negociaciones Colectivas.
La secretaria general de Ctera, Sonia Alesso manifestó: “Vamos a presentar la impugnación de esta reunión. Viola la paritaria nacional docente. Están pretendiendo con un decreto violar una ley”.
Ayer, el Gobierno citó para hoy a las 8 a los gremios nacionales a una mesa para discutir un convenio marco que incluye únicamente aspectos no salariales.
“Es una maniobra de marketing político totalmente distractiva”, dijo Alesso, quien aseguró que el Gobierno “no quiere paritaria nacional” y que quiere fijar “un piso, o un techo, del 15%” para los aumentos salariales.
Asimismo, la titular de CTERA afirmó que el Gobierno «niega la representación salarial y viola tres convenios de la OIT”.
También antes de entrar a la reunión, Sergio Romero, dirigente de UDA, afirmó que cancelar la paritaria nacional “es un error político” y puede “poner en dudas el inicio de clases”.
“No queremos fijar por decreto el salario inicial. Es un error, no tiene sustento técnico ni legal”, afirmó.
Respecto de la actualización de un piso del 20% pro encima del salario mínimo vital y móvil que fijó el decreto, Romero aclaró que los docentes no pueden “estar sujetos a una discusión de la que no participamos. El año pasado no hubo acuerdo entre la CGT y la representación del Gobierno, y el salario mínimo vital y móvil se fijó de manera unilateral. Así, los salarios no se van a poder recomponer”.
Anoche, a través de un comunicado, los docentes privados nucleados en Sadop –que no fueron convocados por el Ministerio porque negocian sus sueldos con sus empleadores– también rechazaron la convocatoria.
Un comunicado gremial firmado por su titular, María Lazzaro, aseguró que “el rechazo y el repudio del Sadop se asienta en que el ministro de Educación, Alejandro Finocchiaro, excluyó al gremio de la mesa de negociación” y explicó que “la convocatoria impide la negociación salarial, que es absolutamente necesaria para adecuar el haber inicial del docente al contexto inflacionario que padecen los trabajadores”.