Los grupos piqueteros vuelven a la calle para reclamar por la emergencia alimentaria

A menos de un mes del inicio de año, la relación entre el Gobierno y los movimientos piqueteros volverá a tensarse al máximo a partir de este miércoles: las agrupaciones sociales vinculadas al Bloque Piquetero Nacional marcharán hasta el Congreso y no descartan realizar campamentos en la avenida 9 de Julio si la administración de Cambiemos no escucha sus reclamos por la ley de emergencia alimentaria.

A partir de este miércoles por la mañana la agrupación Barrios de Pie realizará una marcha de diez kilómetros desde la Iglesia de San Cayetano hasta el Ministerio de Desarrollo Social, pasando por el Congreso Nacional. Así lo adelantó Daniel Menéndez de la agrupación Barrios de Pie, quien detalló que entre los reclamos que exigen al gobierno nacional figura que se declare la emergencia alimentaria nacional y se extiendan los beneficiarios del plan Asignación Universal por Hijo (AUH).

«El aumento del 43% al 48% de la malnutrición en niños, niñas y adolescentes en barrios humildes y la necesidad urgente de implementar concretas políticas de contención para los sectores humildes es un reclamo concreto que vamos a reiterar al Gobierno», dijo Menéndez. Según el coordinador nacional de Barrios de Pie, «los números de la pobreza son tristes y se condicen con los números arrojados por el INDEC que muestran un crecimiento de la indigencia en la provincia de Buenos Aires. Creemos que estas son razones más que suficientes para declarar la Emergencia Alimentaria para el territorio nacional».

Desde el Ministerio de Desarrollo Social expresaron que «el Gobierno siempre se mantuvo abierto al diálogo y escuchará una vez más los reclamos que hagan los movimientos sociales». Pero aclararon que la ley de emergencia social incluye una atención especial a muchos de los reclamos que harán este miércoles las agrupaciones piqueteras tanto en el Congreso como en el Ministerio de Desarrollo Social.

Para los dirigentes del Bloque Piquetero Nacional los datos sobre malnutrición en aumento fueron arrojados por los relevamientos que Barrios de Pie hace desde hace varios años en los barrios populares. «Quienes realizan estos estudios estiman que los números volverán a aumentar a partir de la última modificación realizada en la Asignación Universal por Hijo, con la reforma previsional aprobada en diciembre último», dijo Menéndez.

En la marcha le dejarán un petitorio al presidente de la Cámara de Diputados, Emilio Monzó, para que convoque a sesiones extraordinarias para que se trate la ley de emergencia alimentaria. También pedirán una audiencia con la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, para discutir los crecientes niveles de pobreza.

Desde el Ejecutivo sostienen que la tensión que se desató nuevamente con los grupos piqueteros tiene que ver con la idea de ajustar los controles en la implementación de las políticas sociales, especialmente en los planes Argentina Trabaja que contempla fondos para cooperativas en muchos casos nucleadas a Barrios de Pie y la CCC. La idea del macrismo es ampliar la oferta de centros de capacitación y formación profesional y de desarrollo de tareas a los que deben asistir los 261.000 beneficiarios de los planes Argentina Trabaja, Ellas Hacen y Desde el Barrio para cobrar los $4.430 por mes que les paga el Estado. Pero para ello se fortalecerán los esquemas de control para realizar un seguimiento muy exhaustivo de estos programas.

«Sería muy malo que se busque estigmatizar a las organizaciones sociales con falsas acusaciones pensando que de esa forma no se extenderán los reclamos de los sectores más humildes. Las organizaciones sociales existen porque en nuestro país existe un 30% de pobres que buscan organizarse para mejorar su situación; si el Gobierno quiere mejorar esa realidad, debe propiciar el diálogo», afirmó Menéndez.

Entre las propuestas que le llevarán los dirigentes del Bloque Piquetero Nacional a la Casa Rosada para mejorar el reparto de los planes figura:

–La creación de un Consejo Federal encargado de seguir el estricto cumplimiento de todos los aspectos que incluirá la ley, especialmente la evolución nutricional de los niños que reciban asistencia.

-Realizar un relevamiento oficial para detectar a todas las personas con malnutrición o en riesgo de estarlo.

-Brindar una asistencia acorde a dichas personas, entregando bonos alimentarios que cubran las necesidades de una dieta saludable.

–Ampliar el presupuesto destinado a la asistencia alimentaria a los comedores escolares ya que la alta tasa de escolaridad no permite atender a la mayoría de los niños y niñas.

Desde el Gobierno comparten algunas de estas ideas y la semana pasada,  el presidente Mauricio Macri reclamó al Ministerio de Desarrollo Social reforzar los controles y profundizar los planes de trabajo genuino. También se evalúa ampliar en 300.000 beneficiarios el programa de AUH que hoy llega a unos 3,5 millones de niños. Claro que la tensión con los grupos piqueteros y el nuevo reclamo en la calle de los movimientos sociales no ayudará en nada a mejorar el clima de diálogo entre ambos sectores.