20 de diciembre, 2017

Provincia: aprobaron la ley que elimina las jubilaciones de privilegio

Los diputados bonaerenses sancionaron la reforma previsional; incluye la eliminación del régimen especial de retiro para gobernadores y legisladores.

La Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires aprobó y remitió al Senado el proyecto de ley que elimina las llamadas “jubilaciones de privilegio” para gobernadores, vicegobernadores y legisladores.

 

 

También se modificó el régimen especial de jubilaciones del Banco Provincia (BAPRO), con el fin de que sus trabajadores alcancen esa situación de pasivos en similares condiciones que el resto de los agentes públicos bonaerenses.

 

 

La norma, que fue aprobada primero en Diputados y luego sancionada en el Senado, establece que “tendrá derecho a la jubilación ordinaria el afiliado que compute treinta y cinco (35) años de servicios como mínimo y que hubiera cumplido sesenta y cinco (65) años de edad”.

 

 

De esa manera, se sube gradualmente la edad jubilatoria de los empleados del BAPRO a los 65, según el siguiente esquema: 61 años en 2020 y 2021; 62 en 2022 y 2023; 63 en 2024 y 2025; 64 en 2026 y 2027 y, finalmente, 65 años antes del 2028.

 

 

 

Además, modifica la tasa de sustitución, es decir el porcentaje del sueldo activo que percibe un jubilado al bajarlo del 82 al 70 por ciento, con lo que lo “iguala con el resto de los empleados bancarios”, según explicó el diputado de Cambiemos, Marcelo Daletto.

 

 

En esa línea, la norma establece que para el haber inicial se tomará el promedio de los últimos diez años y no el mejor cargo ocupado en la entidad bancaria y que la movilidad jubilatoria no será por variación salarial sino por el índice votado por el Congreso para los jubilados del Anses.

 

 

Por otro lado, se modificó el Código Fiscal en el capítulo que alcanza a las cooperativas para conseguir una mayor equidad y reforzar la finalidad de esos asociados.

 

 

Con estas modificaciones que se sancionaron ayer, el gobierno de Maria Eugenia Vidal aspira a resolver el déficit financiero que genera, entre otras cosas, la caja del Bapro, que en el último ejercicio superó los 5 mil millones de pesos.