El ex vicepresidente, Amado Boudou, se refirió por primera vez al operativo realizado por Prefectura Naval en su departamento del edificio Madero Center, durante una audiencia en Comodoro Py.
En ese sentido, el ex funcionario se quejó de las fotos y videos registrados durante su detención y expresó que fue utilizado «como un trofeo de caza, una cabeza de un ciervo, de un animal que quieran, para mandarla a los diarios».
«No hubo ninguna filtración, esto fue una cuestión armada, cuando llegaron a mi casa estaban filmando desde el momento que entraron, y yo les dije ‘no hace falta que filmen, yo soy Boudou, sé a qué vienen y me voy a entregar’, contó.
Acompañado por sus abogados, Boudou recusó al juez Ariel Lijo por supuesta parcialidad en la investigación ante el juez Jorge Ballestero de la Sala I de la Cámara Federal, que deberá resolver el pedido.
«Es algo que alguien diseñó y pergeñó, y yo tengo que pensar que es el director del proceso y eso me lleva a pedir la recusación», señaló el detenido.
En esa línea, el ex vicepresidente aseguró que el magistrado, durante su indagatoria, le dijo, «al menos ante seis testigos», que «habían cambiado las reglas del juego y que no le quedaba otra alternativa» que dictar la orden de prisión en su contra.
En cuanto a la causa Ciccone y la declaración de arrepentido de Alejandro Vandenbroele, Boudou señaló: «El juez diseccionó la causa para proteger a unas personas y perjudicar a otras».
Tras esta exposición, el imputado y sus defensores estuvieron ante el juez Leopoldo Bruglia, otro magistrado de la Sala I, al que solicitaron la excarcelación del ex vicepresidente.