Unidad Ciudadana, el espacio que lidera Cristina Kirchner, aseguró que la detención del exvicepresidente, Amado Boudou, «es una clara maniobra intimidatoria» del Gobierno de Mauricio Macri.
Para el frente, la detención de Boudou «es una clara maniobra intimidatoria y extorsiva» para «disciplinar a los dirigentes sindicales y de la oposición política» y que sean «sumisos ante la segunda fase del ajuste».
En ese sentido, Unidad Ciudadana denunció «la delicada situación que atraviesa la democracia argentina, donde se ha vulnerado (o se ha terminado) el Estado de Derecho y la división de poderes».
Además, la fuerza se refirió a la orden de arresto dictada por el magistrado federal Ariel Lijo y recalcó que el «es el mismo juez que está investigando la causa del Correo Argentino, en la cual está imputado el actual presidente Mauricio Macri y su familia».
«Macri está imputado en esa causa por administración fraudulenta y negociaciones incompatibles con la función pública. Por derivaciones de ese expediente, renunció un Procurador del Tesoro y un presidente del Banco Nación por dictámenes que no favorecían a la empresa del Presidente», señaló.
Al respecto, remarcó que el Gobierno logró «correr de su cargo a la Procuradora General de la Nación, Alejandra Gils Carbó, y suspendió a uno de los únicos jueces que se atrevió a fallar contra el brutal tarifazo en servicios implementado desde el año pasado, Luis Arias».
«Reafirmamos que nunca nos opusimos ni nos opondremos a que se realicen todas las investigaciones judiciales necesarias a los funcionarios públicos, sean del anterior o del actual gobierno, en el marco del debido proceso y del respeto a las garantías constitucionales, propias de un verdadero Estado de Derecho».