Alrededor de 400 efectivos de la Gendarmería Nacional, la Policía Federal y la Prefectura se dispusieron para realizar los procedimientos en las causas judiciales en las que está imputado Juan Pablo «Pata » Medina, secretario de la UOCRA de La Plata. Así lo revelaron fuentes gubernamentales.
En las últimas horas, el juez federal de Quilmes Luis Armella ordenó la detención de Medina y de otras cuatro personas imputadas en la causa que es una suma de varias denuncias.
En el marco de esa múltiple investigación impulsada por la fiscal federal de Quilmes Silvia Cavallo, confluyen varios casos que tienen a Medina como principal imputado.
Uno de ellos es la disputa ente facciones de la UOCRA por la construcción de la estación Pereyra de Ferrocarril Roca que estaba paralizada a raíz del enfrentamiento entre los hombres de Medina y los de la seccional Quilmes.
También se investiga por lavado de dinero a una empresa de catering relacionada con el entorno de Medina, por actividades financieras-compra y descuento de cheques- para lo cual no está autorizada por la ley. En ese capítulo de la causa está también imputada la mujer de Medina, María Fabiola García.
El «Pata» se atrincheró al mediodía en la sede de la UOCRA de La Plata. Desde allí, amenazó con «prender fuego la provincia» en caso de ser detenido. Luego, buscó bajarle el tono a su discurso y pidió a sus seguidores, que tenían bombas molotov y prendían fuego neumáticos en las inmediaciones del gremio, que la manifestación «sea pacífica».
Minutos después de las 17, y cuando el juez Armella ya había firmado la orden de detención, Medina decidió huir, acompañado por sus adictos, que raudamente dejaron el lugar.