El presidente Mauricio Macri pidió a los jefes de Estado y de Gobierno que presten atención a la «violación de los derechos humanos que sucede en Venezuela», en el cierre de su exposición en el plenario de mandatarios del G-20.
En ese sentido, Macri hizo «un fuerte llamado a que el mundo tome nota de la situación en ese país», una postura sostenida por el mandatario se sostiene desde el inicio de su gestión.
Su posición, que tiene el apoyo de países europeos como Alemania, se centra en el pedido de elecciones libres, de la libertad de presos políticos -como Leopoldo López- y del respeto al derecho a manifestarse de los opositores al régimen de Maduro.
Cabe destacar que Argentina fue uno de los promotores de la expulsión de Venezuela del Mercosur en diciembre de 2016, ante los reiterados casos de violencia protagonizados por el chavismo en contra de la oposición venezolana.
Por otro lado, el mandatario hizo referencia a la situación financiera y económica de Argentina.
Siguiendo esa línea, Macri explicó «lo que está haciendo para impulsar un crecimiento sostenido y las reformas», dijeron desde la comitiva.
La exposición de todos los mandatarios en el plenario no puede exceder los tres minutos, excepto la del presidente del grupo (actualmente la jefa del gobierno alemán, Angela Merkel), que puede hablar cinco minutos.
Luego de la sesión plenaria de la jornada, los líderes de los 20 países se trasladaron luego a la Elbphilharmonie (un teatro lírico) para ver un concierto especial, tras lo cual serán parte de una cena de gala ofrecida por el gobierno anfitrión.